Unas laminas de cerámica muy finas que se adhieren a la superficie externa de los dientes mediante un cemento de resina especifico que sirven para modificar esteticamente la forma y/o color del diente.
Generalmente se utilizan las carillas de cerámica (hay distintos tipos de cerámica) aunque también estan las de composite. El profesional junto con el paciente estudian previamente el caso y se opta por las que mejor se adapten a las necesidades y requerimientos del paciente
En una primera visita, se hace un diagnóstico previo que incluirá radiografías, fotografías, un escaneado intraoral y un encerado diagnostico
En la segunda visita se preparan los dientes: se elimina parte del esmalte de la superficie en los casos necesarios y se toman impresiones digitales de los dientes.
En algunos casos se puede realizar una prueba real sobre los dientes, llamada mock-up, con la que profesional y paciente puedan ver y evaluar cómo sería el resultado final, tanto a nivel estético como funcional.
Se colocan unas carillas provisionales mientras se fabrican las definitivas con una huella del encerado diagnostico que se ha realizado previamente
Cuando todo es correcto, se realizan las impresiones finales y a partir de estas es cuando se fabrican las carillas definitivas.
En la siguiente visita y una vez estén listas las carillas de porcelana definitivas, se retiran las provisionales.
A continuación se limpia, pule y se prepara la superficie dental en la que aplicar un cemento especial y que permite la unión entre diente y carilla definitiva.